LAS CORTINAS DE HUMO PUEDEN SER PELIGROSAS

«Cuando los ricos se declaran la guerra, son los pobres los que mueren». Jean-Paul Sartre  en “El diablo y Dios”

El derecho soberano del Estado del Perú a crear el distrito La Yarada Los Palos en su propio territorio es indeclinable. No puede estar en discusión. Las protestas –una pataleta pueril— del gobierno de  Chile están fuera de lugar y la insolencia con que se expresan debe ser rechazada con toda energía. Así nomás es.

Pero hay que tener en cuenta que ese distrito –cuya gestación legal llevaba ya siete años en el Congreso— ha sido creado repentinamente “en coordinación con la Cancillería”. ¿No pudieron advertir nuestros diplomáticos, siendo como son, flor de cautela, que la oportunidad en que se aprueba el proyecto de ley creando el distrito era la más inconveniente para la sensible relación con Chile? Porque —obvio incluso para dummies— iba a reactivar la controversia acerca del punto inicial de la frontera terrestre, que desde hace 20 meses tanto Perú como Chile habían “encapsulado” para un abordaje futuro. Justamente cuando Torre Tagle había enviado como embajador en Santiago a un peso pesado que ha debido soportar fuego amigo sobre su gestión. Así, la “agenda de futuro” para la relación bilateral visualizada a partir de la pronta (pero inconclusa) ejecución del fallo de la Corte Internacional de La Haya sobre la frontera marítima, queda frustrada. Hace días fue hecha esta pregunta, cuando menos en términos parecidos: ¿había necesidad de crispar en este momento la relación con Chile? La única respuesta racional es un rotundo no. ¿Y entonces, por qué?

Adivinar intenciones es un arte que comparten magos de vodevil y analistas de inteligencia. Pero el lector zahorí no dejará de percibir en este tema –peludo y erizado—  cierta secuencia de sucesos que proyecta una ruta interpretativa: la alimentada tensión con Chile tiene correlato con eventos cruciales de la política interna de nuestro país.  El contrapunto de notas diplomáticas entre las cancillerías de Perú y de Chile y los comentarios de políticos en ambos países han caldeado el ambiente —para refocilo de los medios de los medios de comunicación concentrados, que hacen bien su papel de cajas de resonancia— y en el espacio bobo donde se fabrica la “opinión pública” de pronto “el problema con Chile” acapara espacio, restándolo a los emputecidos enredos de la farándula local y –esta es la pepa del asunto— al tema de corrupción que corroe la imagen de la persona más emblemática del gobierno.

Nadine heredia

La secuencia de sucesos que es reveladora pasa  por atizar la tensión con Chile mediante un manejo mediático de la controversia—haciendo el juego al berrinche chileno— cuando en paralelo se difunde que prosigue la caída de la aprobación del presidente Humala y de su cónyuge, y cuando se anuncian acciones decisivas de investigación fiscal sobre las agendas de Nadine Heredia. Más leña al fuego con la visita de efectivos del Ejército al Hito 1 de la frontera (que un vocero militar de Tacna justificó y que luego el ministro Pedro Cateriano negó enfáticamente. ¿Acaso es falsa la foto publicada por prensa chilena?). En este punto la crispación se ha elevado al punto que recibimos una amenaza chilena velada (“no seremos tímidos”). Pero seguimos “estirando el chicle” y el presidente Humala consolidó el sábado 7 de noviembre la creación del distrito La Yarada Los Palos. Soponcio rabioso en la cancillería de Santiago.

¿Qué pueden hacer los de chilen, además de enviar papeles?  ¿Hacer presencia en esa tierra baldía materia de tanta irritación patriótica? ¿Aplicar la fuerza considerando que ahora es el “momento precipicio”  para zanjar la cuestión del negado ”triángulo  terrestre”? Alguna vez se escribió que, habiendo hipótesis racionalistas de la guerra, habría que añadir la hipótesis “shit happens”, que sería explicativa  de aquellos casos tan irracionales que califican como estupidez profunda, como el conflicto por Las Malvinas en 1982. Lamentablemente la mierda sigue sucediendo, en varias partes del mundo, y por aquí, ¿estamos inmunizados?

Ollanta Humala tenía hasta el 12 de noviembre para formalizar el nuevo distrito tacneño –cuya legalidad y legitimidad nadie puede negar, excepto el obnubilado gobierno chileno–  pero lo hizo cinco días antes, sábado, sabedor de la que sería –y ha sido— la inflamada reacción chilena, un día antes de que los directores de los programas políticos dominicales de la TV entren en trompo al tener que barajar tiempos para la explotación sensacionalista de este “tema de verdadera preocupación nacional” sustrayendo espacio a jugosos reportajes sobre las agendas de la señora Nadine. El martes 10, en el Ministerio Público, se van a realizar las pericias grafológicas a la esposa del presidente, para determinar la autoría de las famosas agendas. El resultado previsiblemente será explosivo. Alguien necesita un ruido todavía mayor, sobre un asunto que una a los peruanos tanto como un encuentro futbolístico de la selección blanqui-roja. Este señor requiere el grito masivo, gregario, tumultuoso como de barra brava: ¡Viva el Perú, carajo, muera Chile, mierda! Y así se consigue apagar el otro tema en días críticos.

la guerra

Las guerras en las colonias y neocolonias, donde la mayoría de las víctimas son los que menos acceso a derechos tienen: campesinos, mujeres, pobres. 


Deja un comentario